, ¿Todas las emociones son buenas?
Sí, todas las emociones cumplen una función y todas son necesarias, aunque comúnmente encontramos que están divididas en buenas y malas; positivas y negativas; adaptativas y desadaptativas. Os recomendamos la película «Del revés (Inside out)».
¿Qué pasa cuando siento una emoción considerada «negativa»?
Si yo considero una emoción como «negativa», es porque a lo largo de mi vida, me han enseñado (y yo he aprendido) que es «mala», que no puedo sentirla, en consecuencia, no podré aceptarla cuando aparezca, y entre otras cosas, querré salir de ella lo más rápido posible, sin embargo es necesario que la escuchemos y veamos qué nos tiene que decir.
Veamos un ejemplo: la tristeza. No nos gusta sentir tristeza y tampoco nos gusta ver a nadie triste. Cuando vemos a alguien llorar, normalmente no sabemos qué hacer, algunos nos ponemos nerviosos, otros estamos incómodos y hacemos todo lo posible para que esa persona deje de llorar, entre otras:
- Quitar importancia a lo sucedido: «Venga anímate, no es para tanto»
- No dar importancia: «¿Por esa tontería estás llorando?»
- Comparar: «Podría haber sido mucho peor»
- Dar consejos: «Tendrías que haber dicho/hecho…»
- Culpabilizar: «Si no fueses tan buen@ no te pasaría ésto»
- Dar una solución: «Lo que tienes que hacer es…»
¿Qué hacemos con ésto? Bloqueamos la emoción y hacemos más difícil que la persona pueda expresarla cuando vuelva a sentirla, por lo que puede dejar de hacerlo y empezar a «tragársela» o desconectarse para no sentirla.
Esto lo empiezan a aprender los niños y niñas desde pequeños.
¿Qué podemos hacer para favorecer una sana expresión emocional?
Empezar a aceptarlas, cuando una persona está triste, no sabemos qué necesita realmente, sin embargo ahora ya sabes qué no necesita. Simplemente, escucha lo que tiene que decir, sin juzgar, sólo quédate a su lado y si quieres después puedes preguntarle qué necesita, quizás sea un abrazo, o únicamente saber que estás ahí y puede contar contigo.
¿Cuándo son negativas las emociones?
Cuando son desadaptativas, y esto es, cuando dejan de cumplir su función y nos quedamos atrapados en ellas.
Puedo estar triste un día y no pasa nada, no hay que cambiar la tristeza, está diciéndome algo, el problema empieza cuando no puedo dejar de estar triste en dos semanas y deja de haber razón aparente.
Os propongo una actividad:
- Piensa en la última vez que estuviste triste
- Párate, ¿puedes identificar algo por lo que te sientieses así?
- ¿Qué hiciste cuando estabas triste? ¿lo contaste a alguien?
- ¿Cuál fue la respuesta de la otra persona? ¿qué hubieses necesitado?
Ahora haz un cambio en el orden y cuenta contigo:
- Respira, escúchate, conecta ¿qué necesitas?
- ¿Puedes/quieres pedirle ésto a alguien?
- Hazlo
- Y ahora cuéntale lo que ha pasado
¿Tienes alguna duda? Ponte en contacto con nosotras y estaremos encantadas de atenderte.